sábado, 7 de marzo de 2015

Prosperidad de un español

Si hablamos con un estudiante científico o tecnológico de los últimos años sobre su futuro es realmente desolador, un gran porcentaje ya baraja tener que emigrar para poder encontrar un empleo de las características que satisface su titulo. Otros optan por hacer un máster o una segunda carrera con el afán de pasar el tiempo haber si esto cambia, y el resto debe aceptar empleos con los que apenas puede pagarse la manutención. Este es el panorama de un español entre 25 y 30 años que termina su carrera universitaria. 

En la investigación las puertas están cerradas, apenas existen fondos y los pocos que hay se reparten como siempre, entre padrinos y ahijados. Intentar hacer un doctorado, salvo ser un genio es casi imposible, e incluso tras terminarlo esto no te garantiza nada, salvo que en ese tiempo puedas ocupar una plaza. Si nos centramos en las oposiciones, vemos como disminuyen el numero mientras aumenta el numero de demandantes que se presentan, las notas son tan elevadas que es prácticamente imposible colocarse en el primer intento, necesitaríamos dos e incluso tres para llegar a esas notas. 

La ultima opción es una empresa, ser empresario. Esta es la mas valiente y a la vez mas loca, aunque existen algunas ayudas al principio, no nos engañemos, los pagos de impuestos, seguridad social y gastos iniciales hacen que el que se arriesgue tenga un buen respaldo, ya que un patinazo en esta situación hace que durante un periodo largo de tiempo no puedas dar marcha atrás. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario